¡Ay! Qué noche tan serena
que no tiene movimiento.
¡Ay! Quién pudiera tener
tan sereno el pensamiento.
(Popular)
Tomada el 12 de agosto de 2011, después de la medianoche,
en Veigas (Brañas de Sosas de Laciana) con Canon 550D + EF 17-85, Av 5,6
(45 tomas de un minuto + 20 con tapa)
Imagen tomada el 10 de agosto de 2011, entre la una y las dos de la noche,
en la braña del Xaral (Caboalles de Abajo). (45 +20)
Ayer estuve en la Laguna Grande de Babia y hoy en la braña de El Xaral de Caboalles. Fui a ver las Lágrimas de San Lorenzo, la lluvia de meteoroides que ocurre cada año por estas fechas. Las estrellas fugaces parece que salen disparadas desde algún lugar frente a la constelación de Perseo pero, en realidad, vienen de aquí al lado. Y de estrellas no tienen nada. Solo son la caspa desprendida por la cabellera del cometa Swift-Tuttle en sus viajes anteriores. Cada primera quincena de agosto, cuando nuestra órbita se cruza con la suya, la Tierra pasa el aspirador gravitatorio y absorbe las decenas de miles de partículas que vemos arder cuando penetran en la atmósfera.
El Swift-Tuttle, témpano con veinte kilómetros de diámetro y muchos millones de toneladas, navega a 65.000 kilómetros/hora. La última vez que pasó por aquí cerca fue en 1992. Volverá a hacerlo en el 2126. Los astrofísicos dicen que quizá un día choque contra nosotros, pero descartan que eso ocurra durante los próximos mil años. Menos mal.
Como vamos hacia el plenilunio, estas las noches no son las mejores para observar el firmamento. De todas formas siempre es mejor mirar al cielo que a los telediarios; es lo que va de lo sublime a las miserias.
La siguiente imagen fue la última tomada ayer desde la orilla de la laguna. El objetivo apunta por encima del Pico de la Orbia (1.823 m.), sobre Cacabiechu, en el valle de La Cueta, captando la Osa Mayor cuyas principales estrellas he unido con líneas amarillas.
La foto de abajo es la fusión de sucesivas imágenes como la anterior, tomadas a lo largo de cuarenta minutos. En ese intervalo, la tierra ha girado 10º de arco sobre su eje, con lo que el resultado es éste.
Tomada la noche del 9 al 10 de abril de 2012 con Canon 550D + EF 70-200 f4 IS
Cuando la luna supera el cuarto creciente, refleja demasiada luz y atenúa el esplendor del cielo. Sin embargo, es en estas condiciones cuando mejor se deja observar ella misma.
Al ser iluminada lateralmente, unos prismáticos de mediana calidad son más que suficientes para verla en relieve. Se aprecia con claridad la sombra de las montañas y el borde de los profundos cráteres. Y en la zona de frontera entre el día y la noche, algunos puntos brillantes que destacan no son sino las cimas más altas a las que alcanza el sol.
La imagen superior, bajada de internet, está tomada en la misma posición que la obtenida ayer desde Lago de Babia, aunque con medios muy diferentes. En ambas se distingue el cráter Copérnico (en la foto de abajo lo he señalado con una flecha). Al encontrarse en la franja entre el sol y la sombra, entre el día y la noche, sus bordes se ven iluminados debido a la altitud, mientras que el fondo permanece oscuro.
El cráter Copérnico tiene 93 kilómetros de diámetro y ¡¡ 3.760 metros de profundidad !!
Los hay mayores. El diámetro del Bailly alcanza los 300 km.
Durante las horas pasadas alrededor de la Laguna Grande, alguna perseida rayó de vez en cuando el terciopelo negro apolillado mientras, entre fogonazo y fogonazo, yo me ocupaba en otras cosas. En escuchar el sonoro vuelo rasante de una bandada de patos, el golpeteo metálico de las ranas al zambullirse, el relincho lejano de un caballo, el vocerío de no sé qué pájaro insomne y, sobre todo, en intentar que una vaca cariñosa y noctámbula comprendiera la conveniencia de mantenerse alejada del trípode.
Hoy, en El Xaral, estuve muy bien acompañado por unos cuantos mastines.
5 comentarios:
Preciosas fotos. Por lo que veo ya te funciona bien la cámara...
Sí, vuelve a funcionar porque le compré un objetivo nuevo. Y barato. (He descubierto que cuando un objetivo caro y pesado baja en caída libre desde un metro de altura hasta un suelo embaldosado, da a su propietario un disgusto de la leche. (Así, por procedimientos empíricos,fueron descubiertos grandes principios de la física y también de la economía).
J.
nada entiendo de astronomia, pero se que hay muchos interesados en ella, pero si entiendo de esos ruidos que describes, pajaros, ranas, relinches, y de cielos estrellados, conjuncion estupenda para una noche por esos lares; no sabia como articular una entrada sobre lo que experimento en las noches de primavera y verano por ahi, curuxas, sinfonias de mil pajaros, zumbos, grilleria serenadora, con un cielo estrellado que diria un profano ¡hay que noche tan serena......!, esta entrada tuya llena esa laguna;recuerdo las noches de san roque de chaval, la seduccion que me producia perderme por los entornos del pueblo en esas condiciones y a poder ser bien acompañao. ¿te imaginas un melandro de casa rural autoctona comercializando estos placeres pa los sentidos?, yo la verdad que no, si estoy equivocao admito replicas.saludos y feliz san roque, si queda algo.
De San Roque queda poco, muy poco. Ya sabes: el instrumento de medida es la lejanía de aquellos días y aquellas "nueites" bien acompañadas y, sobre todo, el espesor que cada cual tiene en el callo del alma.
En el Valle sí que hay quien sabe vender esos placeres para los sentidos. Conozco al menos dos personas (o sociedades) que organizan salidas nocturnas a las brañas y al monte durante las cuatro estaciones. Y lo organizan bien.
Salud,
J.
no sabes el peso que me quita de encima el saber que hay gente que rentabiliza esto, de verdad...., ahora bien, no trasciende, no se sabe, no suena, no aparece, ya dije que la promocion de las casas rurales de laciana es pobrona y lo mantengo, por lo que sea, que eso ya no lo se.tipica cazurreria supongo.
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